"No volví a separarme de ellas" de David Vega en Neo2

Desde el prestigioso magazine de Neo2, como es costumbre, siguen apostando por los nuevos talentos. Ahora le ha llegado el turno a nuestro antiguo alumno del Curso de Realización en Cine Digital, David Vega, un joven cineasta que lleva cosa de un año realizando videoclips y pequeñas piezas audiovisuales. La última de ellas, "No volví a separarme de ellas", la estrenaron en exclusiva en la web de NEO2 y hoy queremos compartir con todos vosotros la entrevista.

-David Vega para NEO2 (fuente):

Así nos cuenta su trayectoria el propio David: “Después de acabar la carrera de Comunicación Audiovisual, la cual sirve para más bien poco, comencé a moverme por productoras de publicidad, gracias a la búsqueda de prácticas. Empecé haciendo tratamientos de director, maqueando y buscando referencias, de lo que sigo viviendo hoy en día. Nunca pensé en verme dirigiendo, siempre he sido muy inseguro, pero fui aprendiendo y conociendo a diferentes directores y profesionales del cine y la publicidad, vi que todos lo somos, de una manera u otra”.

Empezar a dirigir fue cuestión de tiempo: “Me lancé a estudiar un curso de Realización en Cine Digital en EFTI. Fue lo justo para dar el salto y convencerme de lo que quería, dirigir. Hoy día sigo haciendo tratamientos porque me llena, también en lo económico. Sigo aprendiendo con cada director y cada productora que conozco. Es un mundo complicado, cada vez somos más y me gustaría mostrar mi visión, íntima y propia”, asegura.

Así recuerda Vega la génesis de No volví a separarme de ellas: “El pasado verano pasé un por un momento más bien frágil, donde veía un futuro complicado y entraba poco dinero. Estos bajones típicos de cualquier persona que se dedique o quiera dedicarse a esto. Me agarré a este pequeño ‘break’ para transformarlo en historia, desde otro punto de vista. Siempre me interesa contar historias de mujeres, tengo cierta debilidad por ellas. Me puse a escribir y a eso le unimos las ganas de rodar con una Bólex que tiene mi chico, la cual nunca había usado. Pues bien, juntamos su cámara y mi idea como experimento y salió esta pieza”.

El cineasta asegura que quería desahogarse “de una forma visual. Contar una historia que bien puede ser real y de alguna forma trasladar un mensaje. Al fin y al cabo, todo son momentos, y pasan. Cuando estamos en ese bucle, solo tenemos que mirarnos, creer en nosotros mismo y buscar dentro de nuestra cabeza todo lo bueno y lo mejor que tenemos para explotarlo. Y quizás, como en el cortometraje, cambiar de vida si es lo que de verdad queremos”.

“En la pieza hablo de una chica joven, que en cierto momento de su vida se ve tan ahogada que tiene que rendirse a practicar la prostitución hasta que un día, desde lo más profundo Del Pozo, tras una mala experiencia, decide buscarse a sí misma y volver a encontrar la felicidad que había perdido. Ese ‘yo’ delicado y feliz representado por las flores”.

David nos cuenta cómo eligió a la protagonista: “Primero me decidí por escribir a Claudia Galán, la chica protagonista. Es mi prima segunda y lleva en Madrid el mismo tiempo que yo, haciendo carrera como actriz. Nunca habíamos coincidido ni tenido la oportunidad de coincidir, pero ambos sabíamos el uno del otro. Le llamé un día, le conté la idea y justo se encontraba en un momento clave para hacer algo así. Teniendo a esta pedazo de mujer, no lo digo porque seamos familia, no me lo pensé”.

Sobre el rodaje, Vega lo recuerda así: “Nos juntamos un grupo de amigos, por puro amor al arte, un domingo a finales de noviembre. Entre Tomás y yo pagamos las pelis de Kodak para la Bólex y el revelado. Elena y Ángela nos echaron una ayuda tanto con la ropa, como con los créditos y la producción. Alba siempre con su carácter y estilo maquillando. Edu con su equipo de sonido. Caye nos echa una mano, como siempre, para dar vida al ‘churro’ de brutos que nos llega desde el laboratorio de revelado. Y cómo no, Noemí dándole los toquecitos perfectos de color”.

Con respecto a las localizaciones, “rodamos los exteriores por la mañana bajo el puente de Pacífico, donde grabamos ciertos planos que nunca salieron, debido al ‘experimento’ de la cámara. Por la tarde, después del parón de la comida, nos fuimos a los bajos de Azca, un sitio que desde que llegué a Madrid me mueve. Me parece un mundo extraño y oscuro donde siempre había querido rodar”.

'No volví a separarme de Ellas' from David Vega on Vimeo.

¡Enhorabuena David!