Alba García Álvarez (España)

Conocerse a si mismo quizá sea uno de los mayores retos de la vida. Caminamos constantemente buscando sin darnos cuenta de que todo lo que necesitamos reside en el interior. La pureza del alma, los sentimientos que afloran, que crean y que destruyen. Esa voz interior que nos guía cuando se apaga la luz. Lo que somos. Todos y cada uno de los miedos que tenemos forman y dibujan una parte de nosotros. El alma, la mente humana, los pensamientos. Mirarse en un espejo y no ver un rostro, sino algo borroso, confuso, algo que viene de dentro. Experimentar consigo mismo, atreviéndose a soñar, a crear cosas que solo tu ves. Quizá todo podría resumirse en una sola palabra o más bien, en una sola frase pero como decía  un gran amigo mío “la vida es demasiado simple para simplificarla más”. Siempre he creído que la belleza nacía del ser y mi proyecto no deja de ser eso. Una búsqueda constante de mí misma a través de autorretratos que llevo realizando desde los 13 años. Fotografías que intentan dibujarme, recrear mi personalidad y no un físico vacío. Una forma de vivir y sobre todo de sentir extremadamente sentimental.  Imágenes que cuentan la historia de cualquier persona pero que no dejan de hablar de alguien en concreto. Luces, sombras…sueños, miedos. Todo es equivalente, todo se iguala. No existe el bien ni el mal, solo el alma. El alma y cada uno de los factores que la componen y todo eso es lo que al final embellece la apariencia física. Lo que dota a un rostro de algo especial. Lo que hace que el espectador sienta que lo que esta viendo tiene vida. Porque… ¿Saben? Creo que al final fotografiar se trata de eso… de congelar momentos, personas, historias y sentimientos que quizá nunca mas podrían volver a existir.